La Historia de un Ícono Inmortal
El majestuoso Teatro de la Escuela Militar fue el escenario de una imponente producción del musical «Evita», una obra que revive la vida y legado de Eva Perón, la carismática y controvertida primera dama de Argentina. En esta magnífica puesta en escena, el papel de Evita fue interpretado con fuerza y pasión por la talentosa actriz estadounidense Molly Flanagan, mientras que el cantante italiano Michele Cortese asumió el rol de Che Guevara, el narrador y crítico omnipresente que guía al público a través de los altibajos de la vida de Eva.
Con más de 20 cantantes en escena, la obra cobró vida a través de impactantes interpretaciones de las canciones más emblemáticas del musical, como «Don’t Cry for Me Argentina», «High Flying Adored» y «Rainbow High». La poderosa actuación de Molly Flanagan capturó la ambición, el carisma y el lado vulnerable de Eva Perón, mientras que Michele Cortese ofreció una interpretación aguda y apasionada de Che, aportando una dosis de crítica social y aguda observación política. Juntos, generaron una química electrizante que mantuvo al público cautivado durante toda la velada.
La música fue interpretada en vivo por la Orquesta Filodramática de Chile, dirigida por el maestro Alexander Shitikov, quien una vez más demostró su capacidad para llevar a cabo una ejecución impecable del icónico score de Andrew Lloyd Webber. La combinación de la riqueza orquestal y las voces en escena transportó a los espectadores a los momentos más significativos de la vida de Eva Perón, desde su humilde origen hasta su ascenso al poder y su trágico final.
Uno de los aspectos más innovadores del show fue el uso de visuales animadas, proyectadas en una espectacular pantalla LED, diseñadas por Ronald Jeraldo. Las imágenes acompañaron a la perfección el desarrollo de la historia, recreando tanto la majestuosidad de la Casa Rosada como las calles de Buenos Aires, añadiendo una capa visual que enriqueció la narrativa y dio vida al contexto histórico de la obra. La escenografía, combinada con la tecnología, hizo que la experiencia fuera inmersiva y deslumbrante, capturando el espíritu revolucionario y la pasión que caracterizan a «Evita».
La impecable producción logró capturar la esencia de una de las figuras más icónicas de la historia latinoamericana, ofreciendo al público una noche inolvidable de teatro, música y emoción, donde la fuerza dramática de la obra y su compleja protagonista brillaron en todo su esplendor.
